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El Consejo ha adoptado hoy un texto de Conclusiones en las que expone cómo puede utilizarse la recuperación de la crisis de la COVID-19 para potenciar una industria europea más dinámica, resiliente y competitiva.
En el documento, el Consejo destaca que es necesaria la solidaridad europea para dirigir una recuperación económica rápida, sostenible e integradora y un futuro sostenible a largo plazo en las industrias de la UE más afectadas por la pandemia de COVID-19.
Reitera que la transición ecológica y digital y la recuperación económica de la UE deben ser justas y articularse en torno a los principios de competitividad, integración del mercado único, sostenibilidad, cohesión, integración, circularidad y protección del medio ambiente, solidaridad y respeto de las normas sociales.
Reafirma la importancia de conseguir la autonomía estratégica sin dejar de preservar una economía abierta en los ecosistemas industriales más sensibles y en ámbitos específicos, como la sanidad, la industria de la defensa, el espacio, la tecnología digital, la energía y las materias primas fundamentales.
A juicio del Consejo, la respuesta a los efectos económicos de la crisis de la COVID-19 y a la creciente competencia internacional debe ser una cooperación e integración europea reforzada y más intensa para crear un entorno empresarial sostenible, atractivo y competitivo.
Dicho entorno debe caracterizarse por:
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un mercado único plenamente operativo, profundizado y reforzado, también en el sector de los servicios,
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unas condiciones de competencia equitativas efectivas para que las empresas europeas compitan en el mercado interior y a escala internacional en las cadenas de valor mundiales,
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una infraestructura de datos y unas redes de comunicación que sean punteras, seguras, resilientes e interoperables,
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la capacitación y el reciclaje profesional, la formación y la empleabilidad de los trabajadores,
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un sistema europeo de normalización que funcione correctamente,
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el liderazgo tecnológico de la UE,
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la especialización inteligente,
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la sostenibilidad,
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el refuerzo de las cadenas de valor europeas y
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la seguridad del suministro de materias primas en Europa.
Para observar mejor la evolución en el sector, se invita a la Comisión a que determine los indicadores clave de rendimiento para el control de la estrategia y la competitividad industriales de aquí a finales de marzo de 2021.
Por último, se solicita a la Comisión que presente la actualización de su nuevo modelo de industria antes del Consejo Europeo de marzo de 2021.
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